Aire y Agua, Palabras que no pesan

Colecciono palabras. Algunas están escritas en papelitos insulsos, para la ocasión, hechas de afán. Otro día las pasaré de nuevo, con esmero. Otras, las copio con buena caligrafía, en cartu- linas escogidas. Tengo plumas de tinta con puntas anchas. Después las guardo todas en una caja de lata pequeña, redonda, azul y de colores, que tiene esta inscripción: “El universo no está hecho de átomos, sino de historias”.

Este libro Aire y Agua, Palabras que no pesan, a lo mejor sin pretenderlo constituye la auto-geografía o más aún: la autocosmología de Andrés Calle Noreña, quien con toda legitimidad puede mandar a hacer unas tarjetas de presentación que bajo el nombre digan, en el sentido más wayuu de la palabra, Palabrero.